¿Y si no era depresión... sino perimenopausia?

Quiero contarte algo muy personal.

Soy psicóloga, y aun así caí en la trampa: durante mi perimenopausia me sentía profundamente triste, aunque todo en mi vida estaba bien. No había dramas, no había crisis externas… y sin embargo, mi autoestima se derrumbaba.

Lo peor fue pensar que era un fallo mío: “si todo está en orden, ¿por qué me siento rota?”.

Hoy sé que esa tristeza tenía raíz hormonal. El estrógeno y la progesterona también regulan serotonina, dopamina y GABA. Cuando bajan, el cerebro sufre: aparecen insomnio, ansiedad, pensamientos oscuros. Y lo confundimos con depresión o con “no agradecer lo suficiente”.

Pero no es debilidad. No es locura. Es biología. Y reconocerlo es el primer paso para dejar de castigarnos.

✨ Lo que me ayudó a sanar fue oración, meditación y un rigor amoroso en mi control mental. Descubrí el circuito pensamiento–emoción:
👉 imagen mental → narrativa → emoción → síntoma físico.
Y aprendí algo liberador: no todo lo que pienso es verdad.

🌸 La verdad incómoda, pero libera:

• Tu tristeza puede tener raíz hormonal.

• No eres tu síntoma, eres más grande que él.

• La transición hormonal también ocurre en tu mente.

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Un abrazo fuerte,
Emilia (VerstatBE)